A veces
pensamos que la naturaleza es algo sin vida y por tanto no merece ninguna
consideración especial, nos hemos acostumbrado a ver la naturaleza como algo
que estaba totalmente a nuestra disposición, un almacén del cuál extraer
materias primas, algo sin vida. No
podemos respetar a la naturaleza si no nos podemos respetar a nosotros mismos.
Podemos empezar haciendo conciencia de lo que daña a nuestra naturaleza, pensar
como podemos repararlo, con un poquito que ayudemos podemos hacer una gran
diferencia. La naturaleza es nuestra casa y por eso debemos respetarla y
cuidarla, de ella depende nuestra felicidad y vida. Tratar de que las demás
personas reflexionen del daño que hacemos a la naturaleza y por lo tanto a
nosotros mismos.
Nosotros
como buenos ciudadanos debemos hacer frente a toda la problemática que se nos
presenta y a su vez con la ayuda de empresas y de entes capacitados para la preservación y conservación del medio ambiente poder generar iniciativas que mejoren tanto la
calidad del medio ambiente como de nosotros mismos que como seres humanos
hacemos vida en él. Todo ello permitirá una mejora significativa. Simplemente debemos
reflexionar y aportar un granito de arena para que todo lo que nos afecta o nos contamine se pueda minimizar generando un ambiente cien por ciento sustentable
y ecológico.
ANTHONY GERARDO VINCIGUERRA DE ANGELIS.
No hay comentarios:
Publicar un comentario